Los Estados miembros de la UNESCO confirmaron este jueves, durante la 43ª reunión de la Conferencia General en Samarcanda, la designación de «Jaled al Anani» como su nuevo Director General. El reconocido egiptólogo y exministro de Turismo y Antigüedades de Egipto sucederá a la francesa Audrey Azoulay.
La votación fue un trámite formal, ya que Al Anani había sido propuesto para el cargo por el Consejo Ejecutivo de la agencia hace un mes. En la Conferencia General, la designación obtuvo un amplio respaldo: 172 votos a favor, 2 en contra y una abstención.
Primer Árabe al Frente de la Organización
Al Anani se convierte en el «primer director general árabe» y el segundo africano en la historia de la UNESCO. Su trayectoria es notable, habiendo comenzado en la década de 1990 como un discreto guía turístico en El Cairo, para luego escalar posiciones en el ámbito académico y gubernamental de Egipto, país que celebró recientemente la inauguración de su Gran Museo Egipcio.
Al asumir el cargo, el egiptólogo de 54 años expresó su profundo agradecimiento:
«Pero más allá de toda pertenencia regional o cultural, serviré antes que nada a la humanidad en toda su diversidad«, declaró Al Anani, quien asumirá efectivamente el puesto el 15 de noviembre.
El nuevo director describió su misión como un «sueño» y un «viaje profundamente humano» que lo convenció de que el mundo actual «necesita una Unesco fuerte y unida» para hacer prevalecer la paz.
A pesar del apoyo casi unánime en la votación, la candidatura de Al Anani no estuvo exenta de críticas por parte de grupos defensores del patrimonio.
La ONG «World Heritage Watch», con sede en Berlín, instó a los países a reconsiderar el nombramiento, citando la supuesta incapacidad de Al Anani para proteger importantes tesoros culturales de su país durante su gestión ministerial.
En una carta respaldada por más de 50 organizaciones y expertos, se mencionaron las siguientes preocupaciones:
La demolición de partes de la histórica «Ciudad de los Muertos» (una necrópolis de El Cairo declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO).
La expansión de obras turísticas cerca del Monasterio de Santa Catalina en el Sinaí (también Patrimonio de la Humanidad).
«Es irresponsable confiar el puesto más alto de la organización encargada de preservar el patrimonio mundial a alguien con semejante historial«, señaló el grupo de la sociedad civil.
Fuente: El Universal