La actividad comercial en Caracas no ha logrado replicar el ritmo que mostró en 2024. Así lo afirmó Luis Montero, presidente de la Cámara de Comercio, Industrias y Servicios de Caracas, quien advierte que el balance del año está marcado por una desaceleración visible y por factores macroeconómicos que siguen condicionando el consumo.
«Durante la primera mitad de este año hubo una actividad económica más lenta que en 2024», señaló a Fedecámaras Radio.
También explicó que la inestabilidad cambiaria que se arrastra desde la segunda mitad del año pasado, sumada a la presión inflacionaria y a la pérdida de poder adquisitivo del venezolano, ha limitado el desempeño del sector.
El repunte que se observó en parte del tercer trimestre —impulsado en cierta medida por expectativas vinculadas a la actividad petrolera— no ha sido suficiente para igualar el dinamismo del año previo. «En comparación con el año pasado ha sido una actividad más lenta de lo que tuvimos en 2024», insistió.
Expectativas moderadas para el cierre del año
El empresariado espera tradicionalmente un repunte de las ventas en los últimos meses del año, pero esta vez el escenario viene condicionado por variables que no dan tregua. Montero reconoce que el comportamiento estacional juega a favor del comercio, aunque advierte que la inflación y el deslizamiento del tipo de cambio serán determinantes.
«El crecimiento económico del país en los últimos años ha estado signado por el consumo privado, y el reto ahora es ver cuál va a ser la capacidad de consumo que va a tener el venezolano», explicó.
Entre las fuentes que podrían estimular la demanda mencionó prestaciones, aguinaldos y, en menor medida, ahorros acumulados.
El dirigente gremial considera que sí habrá un incremento en el movimiento comercial en este último trimestre, pero evita adelantar juicios sobre su magnitud. «Definitivamente estamos esperando una mayor capacidad de consumo para este último trimestre del año; sin embargo, difícilmente podemos valorar si será más acelerada o menos acelerada que lo que fue el último trimestre del año pasado», apuntó.
La inflación y la devaluación, admite, pesan más que en ciclos recientes, lo que introduce un nivel adicional de incertidumbre sobre el comportamiento del mercado en lo que queda de año.
Fuente: Finanzas Digital